La cámara de los nuevos modelos del iPhone son el punto fuerte de estos dispositivos y una de las características más nombradas desde su presentación el pasado 9 de Septiembre es la posibilidad de grabar video en una resolución de 4K. Por muy buena que sea esta función, tiene sus inconvenientes.
Bien es cierto que ver un vídeo grabado en 4K es maravilloso, ya que se puede observar con detalle cualquier escena de nuestro vídeo. Anteriormente era muy pocos los smartphones que permitan grabar en esta resolución, pero a día de hoy la mayoría de los terminales que salen al mercado lo traen de serie y el iPhone 6s no iba a ser menos.
Si piensas grabar en 4K no compres un iPhone 6s de 16GB
Pero, no es oro todo lo que reluce. La grabación con una resolución 4K trae consigo unas desventajas y es que cada grabación ocupa aproximadamente lo siguiente:
- 30 segundos de vídeo: 188 MB.
- 60 segundos de vídeo: 375 MB.
- 5 minutos de vídeo: 1,9 GB.
- 10 minutos de vídeo: 4 GB.
- 30 minutos de vídeo: 12 GB.
Como podemos observar, el tamaño de nuestro archivo de vídeo es enorme y por tanto, es aconsejable grabar escenas o momentos puntuales en esta resolución y transferir el archivo inmediatamente a nuestro ordenador para liberar espacio de nuestro iPhone 6s.
Uno de los temas más discutidos con la presentación de los nuevos modelos fue la eliminación del modelo de 32GB y el mantenimiento del iPhone de 16GB, que como podemos ver cada año se queda más corto y este año no se podrá grabar demasiado tiempo con él en esta resolución.
