iWatch concepto

Podríamos decir que esta es una de las pruebas más claras de que Apple está trabajando –y ha estado trabajando– en un reloj inteligente o iWatch, como ya le llaman los medios. Desde Cupertino han patentado una correa con muchas más posibilidades que cualquier otra que conozcamos con soporte para gestos tanto del brazo como de la mano, sensores de proximidad y mucho más.

Esta patente publicada en la oficina de Estados Unidos de patentes (vía Appleinsider) está descrita como un dispositivo que encajaría a la perfección con el tan rumoreado iWatch. Esta correa, a su vez, se podría conectar a dispositivos como el iPhone y el iPad, ordenadores o incluso otros iWatch. El nombre que ha recibido en la propia patente es iTime y, según lo que vemos, podría incluso funcionar sin depender del propio reloj, pero está bastante claro que, si Apple llega a presentar esto alguna vez, será el iWatch del que tanto tiempo hemos estado escuchando hablar.

La prueba más contundente de la existencia del iWatch.

El documento de la patente menciona acelerómetros, módulos GPS, paquetes de comunicación inalámbrica y otros mecanismos que no irían en el reloj en sí, sino en la correa. Quizá esto suene a un método alternativo para conseguir ahorrar espacio (más batería) o hacer el dispositivo más fino para que sea más cómodo de llevar puesto.

El dispositivo se podrá conectar a cualquier dispositivo con conexión de datos móviles para acceder a internet así como al iPhone para recoger información y responder a otras peticiones que el usuario lleve a cabo. Todo ello será de forma automática sin que el usuario tenga que activarlo.

El reloj sería capaz de recibir notificaciones del iPhone de modo que alertaría al usuario mediante señales visuales, sonoras o de vibración. Cuanto esto ocurra, el usuario podrá mirar en el iPhone la notificación o utilizar su iWatch para responder directamente.

También se podrán recibir llamadas, mensajes de texto, noticias de redes sociales, y más. Cualquier app que se adapte podrá tener acceso a el reloj para enviar cualquier tipo de información y esperar respuesta. Además, también servirá para controlar la reproducción de música.

Otra función sería alertar al usuario de cuándo el iPhone se ha extraviado o está fuera del alcance de la conexión Bluetooth o la que se use en el momento.



La patente incluye información acerca de patrones que podremos asignar a la función que queramos, como agitar el brazo para responder a una llamada, utilizar cierto número de dedos para dar por leída una notificación y mucho más.

A falta de unos meses aún para que Apple presente este dispositivo, parece que todo apunta a que tendrá una pantalla menor a las 2,5 pulgadas y estará ligeramente curvada para facilitar su uso. Los analistas creen que estará disponible en dos versiones diferentes tanto para hombres como para mujeres.