Llevo bastante tiempo esperando a que Apple termine de corregir los dichosos bugs o fallos que llevan presentes en iOS 7 desde las primeras betas. Uno de los más importantes es su mala optimización para iPad, y cuando digo mala, es mala. Lo peor es que no sólo es este el problema, sino que junto a las decenas de problemas que aún incordian también en iPhone, iOS 7 se vuelve un sistema operativo con una experiencia de usuario bastante negativa…
Recuerdo antes de actualizar la impresionante fluidez que tenía mi iPhone 5, y casi podría decir lo mismo de mi iPad 3, el cuál vendí hace unos meses precisamente por lo mal que empezó a ir con iOS 7. Todo cambió en cuanto que Apple liberó la versión final de un sistema operativo que parece haber sido desarrollado con prisas, dejando atrás cientos de incómodos bugs y esa impresionante optimización que teníamos en versiones anteriores.
iOS 7 fue rediseñado “desde cero”
Vale, es comprensible que teniendo que reescribir parte del código para el nuevo iOS 7 estén presentes varios fallos, pero eso no quita el deber de Apple por haber perfeccionado mejor su sistema operativo.
Desde que tengo el iPad Air, me he dado cuenta de que necesitamos urgentemente una actualización ya. Los errores empiezan a acumularse y empiezan a hacer mala la experiencia de uso con los dispositivos de Apple. Incluso con el potente chip A7 y todas las mejoras de rendimiento que conlleva, mi iPad no es todo lo rápido que debería ser y aún quedan muchísimas animaciones que mejorar y aumentar su fluidez.
Algo en lo que hay que hacer hincapié es en que la última actualización, iOS 7.0.3, sólo se centró en corregir errores de seguridad en el iPhone y poco más, olvidándose por completo de la mala optimización en iPad, de todos los bugs presentes, de la lentitud de las animaciones que hacen a veces desesperantes usar el dispositivo si llevamos prisa, etc.
Seguramente vosotros seréis testigos de todos estos problemas, y por ello os invitamos a que nos dejéis en los comentarios o respondiéndonos a nuestro Twitter todos los errores que vosotros habéis percibido.